Conk

Malcolm Little

La piel y el pelo. Lo que delataba a los negros. Poco se podía hacer con la piel, por lo menos en 1920. El cabello, sin embargo, se podía alisar aplicando un mejunje asqueroso que abrasaba el cuero cabelludo. La rebelión de Malcolm Little comenzó cuando renunció a su religión, a su apellido, al zoot, al conk.